Te avisa de juicios, y querellas. Si eres el torero, vas a salir airoso de todas las acusaciones. Si la plaza está llena, tienes testigos, y abogado favorable. Si la plaza está vacía, no van a escuchar tus explicaciones. Si el toro te engancha, vas a perder el juicio. Si te ves toreando un animal, que no es un toro, te acusarán de algo que no has cometido.